miércoles, 1 de diciembre de 2010

Los hombres con el dedo índice mas largo tienen menor riesgo de cáncer de prostata

Ya habíamos contado que un dedo anular largo en los hombres era sinónimo de éxito y que en los neandertales la longitud de sus dedos se relacionaba con la promiscuidad. El último estudio sobre los dedos, publicado en la revista «British Journal of Cancer», asegura que los hombres que tienen el índice más largo tienen menor riesgo de sufrir cáncer de próstata.
La investigación, liderada por la Universidad de Warwick y el Instituto de Investigación del Cáncer de Reino Unido, descubrieron que los hombres cuyo dedo índice era más largo que el anular tenían un tercio menos de posibilidades de desarrollar la enfermedad que aquellos con los anulares más largos.
«Nuestros resultados muestran que la longitud del dedo podría usarse como un test para el cáncer de próstata, especialmente en los hombres menores de 60 años, y quizás combinarlo con otros factores como la historia familiar o los estudios genéticos», asegura el profesor Ros Eeles del Instituto de Investigación del Cáncer de Reino Unido y coautor del estudio.
Para llegar a esta conclusión, los científicos compararon a 1.500 enfermos de cáncer de próstata con más de 3.000 varones sanos entre 1994 y 2009. Lo normal, en más de la mitad de los participantes, es que el índice sea más corto que el anular. Los hombres con el índice y el anular igual de largos (sobre el 19%) tenían un riesgo similar de cáncer de próstata, pero en los que el índice era más largo que el anular el riesgo disminuía un 33%, un porcentaje que alcanzaba el 87% en los varones con menos de 60 años.
Exposición a las hormonas
La longitud relativa de los dedos índice y anular se establece antes del nacimiento, y se cree que está relacionado con los niveles de hormonas sexuales a los que el bebé está expuesto en el útero. Así, menos testosterona equivale a un índice más largo. Los investigadores creen que esta baja exposición ayuda a proteger contra el cáncer de próstata durante la vida.
Estudios anteriores ya habían encontrado una relación entre la exposición a las hormonas en el útero y el desarrollo de otras enfermedades, incluyendo cáncer de mama (vinculados a una mayor exposición prenatal a los estrógenos) y la osteoartritis (en relación a tener un dedo índice más corto que el anular).